Nutrición y Salud.

El Hombre y los alimentos están compuestos íntegramente por sustancias químicas (proteínas, hidratos de carbono, grasas, vitaminas, minerales, oligoelementos y agua), y necesitan para su absorción de un proceso metabólico determinado.

Cada alimento se metaboliza con enzimas distintas, por lo tanto, debemos comer de manera que no se acumulen residuos tóxicos, grasas, agua (edema), u otras sustancias que puedan originar dolencias y/o síntomas que no tienen que existir con una correcta alimentación.
La alimentación debe ser adecuada a cada individuo, a su edad, sexo, actividad física y/o enfermedad que pudiera tener.

La alimentación representa uno de los pilares fundamentales de nuestra vida, ya que gracias a los alimentos que diariamente consumimos, nuestro cuerpo puede realizar sus funciones, rehabilitar las estructuras y los elementos que se deterioran, y obtener energía para desempeñar las actividades cotidianas.

Alimento natural es el que ofrece la naturaleza en cada lugar y en su época. Él conviene a nuestra estructura orgánica y necesidades fisiológicas.

De una buena nutrición depende la salud.
Los preceptos para mantener la normalidad orgánica son: respirar aire puro, comer productos naturales, beber abundante agua, descansar lo necesario, y procurar estar alegres.

Por lo tanto, se confeccionará un Plan de Alimentación personalizado, libre de tóxicos y completo en nutrientes, logrando una curación más rápida y suave, pues los órganos de desintoxicación (hígado, riñón y piel) encontrarán las vías de excreción más ágiles y libres.
Restituir el equilibrio de la célula, inicia en el organismo el proceso de curación. Ocurren reacciones en la intimidad de la célula que darán lugar al alivio esperado.